Algunos conceptos para empezar a entender la visión integral de nuestro bienestar y hacerlo sostenible en el tiempo.

Foco en la nutrición principal o primaria
Ser saludable no solo se refiere a la comida que uno come, sino también al agua que uno toma, al aire que respira, a los vínculos que tenemos, a la actividad física que realizamos, a una vida profesional plena, a un desarrollo espiritual y muchas otras cosas. Por lo cual la nutrición principal y lo que comemos (nutrición secundaria) debe ser abordada en conjunto y no en forma separada.
Bio - Individualidad
Hoy en día, como en muchas otras áreas, la información nutricional es tomada de los medios, de internet, de revistas e incluso libros. Estamos “sobre informados”. Leemos sobre dietas que proponen bajar una determinada cantidad de kilos si comemos determinados alimentos, y luego no obtenemos los resultados propuestos. En realidad no es que las dietas fallan, es que cada individuo es distinto y puede requerir determinados alimentos, determinado acompañamiento, otras variables. Aquello que puede ser ideal para uno puede ser veneno para otro. Así de concreto. Por ello se alienta a explorar qué funciona mejor para cada uno y a confiar en lo que el cuerpo nos dice. Solo hay que aprender a escuchar a nuestro cuerpo.
Eliminación
Agregando alimentos saludables en la dieta, en forma progresiva se van quitando los alimentos que no son buenos para tu cuerpo. Más frutas, más vegetales y más agua; voluntariamente conducen a menos cafeína, menos azúcar y menos comida procesada. Entender que “somos lo que comemos", y entender cómo se producen los alimentos hoy en día, nos llevan a tomar mejores elecciones.
Autosanación
Si se le da la oportunidad, el cuerpo tiende a sanarse a si mismo. Somos una sociedad que quiere una pastilla para cada dolor y la quiere ya. Si bajamos la velocidad y nos permitimos el descanso que necesitamos, nos escuchamos física y emocionalmente, el cuerpo va a tener la oportunidad de sanar en un nivel más profundo. La pregunta es ¿le damos ese tiempo?.
Deconstruyendo los antojos
El cuerpo no comete errores, es una super bio - computadora. El cuerpo por si solo, sin ayuda mantiene una temperatura saludable, el corazón no se olvida nunca ni de un latido y nuestros pulmones nunca se olvidan de respirar. Y así un montón de funcionalidades que nos permiten levantarnos cada día y disfrutar del regalo que es la vida. Por lo cual si estamos con algún antojo, escuchemos a nuestro cuerpo y busquemos caminos sanos de satisfacer y entender qué nos está pidiendo nuestro cuerpo. ¿Queremos un trozo de chocolate a las 3 de la mañana o necesitamos un abrazo que nos contenga? Frecuentemente las respuestas a nuestros antojos, se encuentran en nuestra nutrición primaria.
Por dónde empezar
Unas consignas básicas y pequeños cambios en nuestro estilo de vida ayudan a mejorar la salud:
a. Menos carne, menos leche, menos azúcar, menos comida procesada.
b. Menos café y alcohol.
c. Más fruta, vegetales y alimentos integrales.
d. Proteína de calidad.
e. Tomar más agua.
f. Descanso adecuado.
Recordemos, lo importante al final del día no es la perfección sino el progreso. Hagamos pequeños cambios e iremos disfrutando más de un bienestar más profundo.
Estela Pirra.